Estado de ánimo

Es el trastorno psicológico que más se da y es muy dañino para la persona que lo padece y para los de su alrededor. La depresión provoca cambios en la forma de pensar, los sentimientos y el comportamiento. Los síntomas suelen ser la pérdida del disfrute y el interés por las tareas de la vida cotidiana y por las actividades que antes solían gustarle e interesarle junto con un estado de ánimo deprimido.

Otros síntomas pueden ser la ansiedad, problemas de sueño, problemas de deseo sexual, sentimientos de inutilidad y culpa, falta de concentración y toma de decisiones e irritabilidad.

Las personas con depresión tienen pensamientos negativos sobre ellos mismos, de los que le rodean y de su pasado y su futuro. Dejan de hacer actividades agradables y placenteras y también las obligatorias (ir al trabajo, estudiar, levantarse, lavarse…)

Conocido también como trastorno maníaco-depresivo. Se caracteriza por que la persona tiene un estado de ánimo cambiante, mostrando periodos de excesiva euforia o depresión.
Requiere un tratamiento psicofarmacólogico y un seguimiento médico. El psicólogo también aporta un papel importante, proporcionando técnicas, habilidades y orientación al paciente y a sus familiares.

Una persona con la autoestima baja no se siente satisfecha y se considera incapaz de lograr aquellos objetivos que le permitirían ser feliz y estar a gusto con si misma.  Hacen una evaluación negativa de si mismas, tienen sentimientos de culpa y de inferioridad, son pesimistas, tienen una alta frustración con los errores y fracasos y por lo tanto un deficit en las habilidades sociales ya que ellos mismos se reconocen como incompetentes socialmente.